Villa sin escalones, con piscina, en un aparcela plana con algo de vistas al mar, al jardín mediterráneo y con sol de invierno todo el día. ¡En este chalet simplemente te sientes bien! A través del amplio portón eléctrico entras con el coche y lo dejas bajo la vela de sombra. De ahí llegas sin escalón ninguno a las terrazas y a la entrada de la casa. Esta zona de entrada con terraza norte cubierta no sólo encanta con el gran y brillante arbusto de Buganvilea, sino también con vistas al mar y al verde jardín con muchas palmeras y plantas mediterráneas en flor. Desde la entrada se puede sentir inmediatemente el cáracter de la casa: inundada de luz y, sin embargo, acogedora. Hay un salón luminoso en el lado sur, un rincón acogedor junto a la chimenea, el comedor con vistas a las palmeras y una cocina luminosa; todo esto es un área abierta. Un pasillo conecta 3 dormitorios y 2 baños. La gran ducha está a nivel del suelo, también equipada con asas. Los modernos secadores de toallas eléctricos proporcionan u calor acogedor e ambos baños, includo en invierno. Hay amplios armarios empotrados en todos los dormitorios y nuevas unidades de aire acondicionado de bajo consumo para la calefacción, la refrigeración y la deshumidificación en todas las habitaciones. Una cocina de verano totalmente equipada, con pabellón con grandes elementos deslizantes de cristal invita a vivir en el exterior, junto a la gran piscina con acceso seguro y amplias zonas de terraza. Estas se fusionan en zonas de césped de fácil cuidado, e incluso una pista de petanca no falta en el jardín. La cortadora de césped etc se guardan en un trastero exterior. También hay una lavandería con almacén al que se puede acceder desde el exterior. Desde la azotea se puede mirar a los campos de naranjos cercanos, hasta que la vista se desplace hacia el mar, Denia y el Montgó. Camaras de seguridad y un moderno sistema de alarma completan en confort de este chalet. Por la mañana se puede ir a comprar panecillos frescos en el pequeño supermercado a pie, o por la noche se puede disfrutar de un menú mediterráneo en la terraza del restaurante,con vistas a las pistas de tenis y paddle. Una farmacia, pistas de petanca y un centro de equitación completan la oferta local. El campo de golf de 27 hoyos de La Sella está a sólo 5 minutos en coche, incrustado en plantaciones de almendras y naranjas y viñedos. ¡Pronto podrás sentirte en casa en esta villa!

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